Más de 3.800 hectáreas forestales han resultado carbonizadas en las últimas 48 horas por la acción de las llamas, sofocadas o controladas en la práctica totalidad de los focos declarados en cinco autonomías, entre ellas el fuego iniciado en el Parque Natural de Cazorla, cuyo origen se cree intencionado y donde se han quemado 836 hectáreas de pinar de alto valor.
Después del de Cazorla, el segundo gran incendio se declaró el martes en cuatro municipios de la zona de Los Arribes del Duero (Salamanca) y fue controlado en la madrugada de ayer, aunque aún no estaba del todo extinguido, después de arrasar unas 2.130 hectáreas de pasto, matorral y monte bajo, según Efe. Al parecer, el incendio pudo ser originado por la chispa desprendida de un camión que transitaba por la carretera y se propagó debido al fuerte viento. El pueblo más afectado es el de Mieza, a seis kilómetros de Barruecopardo, aunque el fuego también ha arrasado cientos de hectáreas en Cerezal de Peñahorcada y Vilvestre, próximas a la frontera con Portugal.
En las labores se extinción intervenían seis cuadrillas de bomberos, ayudados por dos helicópteros, un hidroavión, cinco camiones y la gran mayoría de los vecinos de las cuatro localidades afectadas. El fuego ha arrasado fincas enteras, como la del alcalde de Barruecopardo, Aurelio Casado, cuya extensión era de 102 hectáreas.
Paraje singular
En la la localidad sanabresa de Manzanal de los Infantes (Zamora), 456 hectáreas también han perecido bajo las llamas. El fuego, que obligó a desalojar a unos 50 vecinos, arrasó un paraje de "gran singularidad", informa Efe.
En Álava, un fuego declarado a las 15.30 de ayer en Villamaderne afectó al Parque Natural de Valderejo. Al cierre de esta edición se ignoraba la cantidad de hectáreas de matorral afectada.
Por otro lado, el fuego declarado ayer en el margen de la N-IV, en el municipio toledano de Ocaña, fue controlado tras arrasar unas 200 hectáreas de pino y cultivo.
En Lleida, un incendio afectó anoche a 130 hectáreas forestales y de cultivos. La circulación de la línea férrea entre Montblanc y Lleida fue cortada durante varias horas.
Por último, dos incendios forestales registrados asimismo el martes en Viana do Bolo (Ourense) seguían ayer activos, aunque controlados, mientras en la Comunidad de Madrid los bomberos continuaban trabajando anoche en la extinción del incendio que el martes se originó en el término municipal de Los Molinos, y que ha afectado a 64 hectáreas de la sierra de Guadarrama.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 2 de agosto de 2001