¿Se acuerdan de las imágenes de Adolf Hitler y su amante, Eva Braun, en la terraza de un hotel con el impresionante fondo de los Alpes? Aquella mansión estaba a 5.000 metros de altura, en el pueblecito alemán de Berchtesgaden, en Baviera, y en ella el dictador escribió Mi lucha y recibió a mandatarios como Mussolini o el primer ministro británico Neville Chamberlain. Tras la II Guerra Mundial, el complejo -en el que estaba la casa de Hitler, el edificio para Hermann Göring, un cuartel para miembros de las SS y otros alojamientos- fue abandonado. Ahora, según el diario The Observer, un grupo británico especializado en hoteles de lujo, Six Continentals Hotels, ha comenzado a construir un edificio con pistas de tenis y minicampo de golf. El hotel, de cuatro estrellas, tendrá 140 habitaciones y, con un presupuesto de 32 millones de libras (8.728 millones de pesetas), abrirá sus puertas a finales de 2004. Por cierto, que se sitúa justo encima de los restos del chalet de Goering, que tenía vistas a los Alpes austriacos. Los comentarios en contra no se han hecho esperar. Durante 50 años, el nombre de Berchtesgaden ha poseído connotaciones tan negativas que ningún promotor se había acercado por la zona: éste será su primer hotel de lujo. Para Michael Friedman, miembro del Consejo Central Judío de Alemania, la noticia es preocupante: 'Hubiéramos preferido un centro donde la gente joven pudiera conocer y hablar sobre el pasado oscuro de la zona'. Incluso miembros del Partido Verde aseguran que el Gobierno conservador del land de Baviera intenta borrar el pasado.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de agosto de 2001