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La muerte de siete soldados pone en peligro el acuerdo de paz en Macedonia

Aviones macedonios bombardean posiciones de la guerrilla albanesa cerca de Tetovo

La espiral de violencia, que ha provocado 25 muertos en los últimos tres días, deja en el alero la firma del acuerdo de paz logrado a duras penas el miércoles en Ohrid por los partidos políticos eslavos y albaneses con el apoyo de emisarios de Estados Unidos y de la Unión Europea.

Las nuevas víctimas se produjeron como consecuencia de la explosión de dos minas anticarro al paso de un convoy militar en un pueblo situado a sólo 10 kilómetros al norte de la capital. La localización de este incidente muestra la extensión del conflicto en Macedonia, que no se limita a la ciudad y región de Tetovo. En esta segunda ciudad del país, con un 90% de mayoría albanesa, se combate en lo que parece una lucha en la que cada bando trata de imponer su control. Cinco personas resultaron heridas ayer en los choques.

En la región de Tetovo la situación subía un peldaño en la escalada de violencia. La agencia Reuters da cuenta de bombardeos en Prsovce, a unos 20 kilómetros al noreste de Tetovo. La agencia cita una fuente diplomática que califica de "seria escalada de los combates" el empleo, por primera vez, de aviones Sujoi Su-25. El diplomático declaró que los aviones dejaron caer bombas en torno a varias localidades cercanas a Tetovo. El ministerio de Defensa confirmó la presencia de aviones, pero negó que arrojasen bombas. Pero Reuters informa desde Prsovce de los cráteres dejados por la explosión de cuatro bombas y cita a una mujer de 23 años, Mirushe Mediu: "La OTAN prohibió a los macedonios usar helicópteros y aviones, pero ellos lo hicieron. No puedo salir a la calle hoy. Tengo mucho miedo. Ellos quieren matar a la gente".

En Prilep, unos 80 kilómetros al sur de Skopje, se celebró ayer el entierro de los 10 soldados muertos en una emboscada el miércoles. En una atmósfera cargada de emoción y cólera, miles de personas esperaban la llegada del cortejo fúnebre. Coches y autobuses portaban crespones negros en señal de luto y se veían en los escaparetes de los comercios las fotos de los 10 soldados muertos. La tensión aumentó con la noticia de los siete muertos. Un cabeza rapada dijo a un periodista: "Si hay un nuevo muerto de Prilep, aquí puede ocurrir una matanza". En esta ciudad, la noche del miércoles, eslavos enfurecidos incendiaron la mezquita y varios comercios propiedad de albaneses.

En Skopje, varios centenares de manifestantes intentaron anoche entrar en la embajada de EE UU, contra la que lanzaron piedras, aunque la policía logró controlar la situación. Después marcharon por las calles desiertas de la ciudad hasta un suburbio albanés y, al grito de "El único albanés bueno, es el albanés muerto", arrasaron varios comercios.

La escalada de la violencia en Macedonia, donde ya nadie parece respetar el alto el fuego acordado el 5 de julio, hace temer lo peor para la firma solemne de la cuerdo de paz. El mediador de Estados Unidos, James Pardew, que ayer se encontraba en Sofía, reconoció que los enfrentamientos suponían "un duro golpe para el proceso de paz". Pardew apeló a las partes a "respetar el alto el fuego para permitir encontrar una salida política y pacífica a esta tragedia" y condenó el uso de la violencia por parte de "los extremistas albaneses".

En la misma línea se pronunció el ministro de Asuntos Exteriores alemán, Joschka Fischer: "El Gobierno alemán condena la continuación de las violaciones del alto el fuego por parte de extremistas armados. Esto vale tanto para la muerte de los soldados macedonios en la explosión de dos minas en el día de hoy, como para la escalada de violencia irresponsable que alimentan los extremistas albaneses en Tetovo".

En Skopje, el portavoz de la OTAN en Macedonia, Berry Johnson, reconoció que la Alianza no puede garantizar ningún alto el fuego. Sostiene Johnson: "Ahora tenemos una oportunidad para dar un primer paso hacia la salida de la crisis y no hacia el inicio de una nueva guerra civil en los Balcanes". Según el portavoz de la OTAN, "Macedonia tiene ahora una oportunidad para evitar que se repitan los trágicos errores de los otros países ex-yugoslavos". Reiteró las condiciones para que la OTAN ponga en marcha la Operación Cosecha Esencial de desarme de la guerrilla: acuerdo político, alto el fuego duradero y un plan de desarme apoyado por el Gobierno y la guerrilla.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 11 de agosto de 2001