El dirigente de Batasuna Joseba Permach manifestó ayer que la explosión del juguete-bomba que mató a Francisca Araunzetamurgil e hirió de gravedad a su nieto de 16 meses el lunes en San Sebastián podría ser "un capítulo más de guerra sucia contra Euskal Herria", ya que "jamás" ETA ha perpetrado "este tipo de hechos de forma indiscriminada". "Más de una vez detrás de estos hechos han estado personas vinculadas a los aparatos del Estado. Aunque no lo sabemos a ciencia cierta podríamos encontrarnos ante un capítulo más de guerra sucia contra Euskal Herria y sus ciudadanos", dijo.
Según el portavoz, se han producido otros "capítulos" similares que "jamás han sido esclarecidos". Permach pidió el esclarecimiento de lo ocurrido, aunque lo consideró "difícil". Se refería así a las explosiones ocurridas el 29 de mayo de 1994 en la playa de La Arena de Muskiz y en el monte Artxanda (ambos en Vizcaya) donde dos artefactos ocultos en bolsos de mano hirieron de gravedad a tres personas. El dirigente transmitió la "solidaridad" de Batasuna a la familia de la fallecida y del niño herido, y anunció que miembros de esta formación asistirán esta tarde al funeral así como a la concentración convocada para mañana por el Ayuntamiento donostiarra.
También el sindicato LAB reclamó una investigación profunda sobre lo sucedido. Pedro Mari Galarraga, hijo de la fallecida y padre del niño herido, es representante de LAB en Cruzcampo.
Ayer tarde, un centenar de personas se concentraron en el Boulevard de San Sebastián, convocadas por Batasuna y la organización juvenil Segi, para denunciar "el terrorismo de Estado", al que atribuyen la explosión del juguete cargado con pólvora.
Los participantes desplegaron dos pancartas con lemas en euskera contra "el terrorismo de Estado" y "los ataques fascistas" a Euskal Herria. Ambas pancartas incluían sendas ikurriñas con crespón negro, enseñas que portaban también varios de los congregados, en señal de duelo por la muerte de María Francisca Eraunzetamurgil, madre de un delegado del sindicato LAB.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 22 de agosto de 2001