Detenida en Málaga una pareja acusada de ayudar a un miembro del 'comando Barcelona'

Las detenciones se produjeron a la una del mediodía en el hotel San Fermín de la localidad malagueña de Benalmádena, donde ambos se encontraban pasando unos días de vacaciones, según precisaron fuentes policiales, que recalcaron que estas dos personas no formaban parte o estaban montando un comando en esta zona, sino que se encontraban disfrutando de unos días de descanso.

Eneko Balantzategi e Izate Etxebarria, que tienen su domicilio habitual en Vitoria, están acusados de los delitos de pertenencia y colaboración con banda armada. Los investigadores creen, tras interrogar a López de Ocáriz, que esta pareja ayudó a huir al terrorista cuando en agosto del año pasado la Ertaintza desarticuló el comando Araba, al que pertenecía. Luego se incorporó al comando Barcelona y el viernes pasado fue detenido.

El arresto de la pareja, que no opuso resistencia, se produjo cuando estaban abandonando el hotel -en el que llevaban diez días- con la maletas ya hechas. Este establecimiento, situado cerca del castillo de Bil-Bil, es un hotel de tres estrellas y más de 300 habitaciones que estos días está prácticamente lleno. Los dos fueron trasladados a la Dirección General de la Guardia Civil en Madrid para prestar declaración.

Este era ayer el único resultado de una operación de la Guardia Civil iniciada en Álava en la noche del domingo para detener a tres personas presuntamente relacionadas con Unai López de Ocáriz. Sólo Balantzategi pudo ser detenido en Benalmádena después de que los investigadores le buscaran en los domicilios de su madre y su abuela en Vitoria. La operación comenzó a las 23.30 del domingo con el registro de una vivienda de la capital alavesa para tratar de localizar a Daniel Gutiérrez Pérez.

En la mañana de ayer se inspeccionó también el domicilio de Iñaki López de Vergara en la localidad alavesa de Legutiano, de la que es natural. En los registros, el instituto armado se incautó de diversa documentación y dos ordenadores. López de Vergara huyó a Francia en junio de 1985 tras un atentado contra un concesionario de Renault en Igorre (Vizcaya). La policía le acusó entonces de formar parte del comando Lekanda, al que se le imputaba esa acción. Permaneció casi tres años en prisión, hasta que fue puesto en libertad provisional a la espera de juicio. No se presentó, por lo que se decretó su busca y captura. En diciembre de 1993, fue detenido en Francia en un rutinario control de alcoholemia. Tras cumplir condena en el país vecino, el ahora buscado fue expulsado a España el 10 de octubre de 1998. Permaneció en prisión durante un año hasta que fue juzgado por la Audiencia Nacional y absuelto de los delitos de pertenencia a banda armada y terrorismo.

Por otra parte, la Guardia Civil también seguía ayer buscando a una mujer catalana que habría apoyado a Fernando García Jodrá en su misión de reconstituir el nuevo comando Barcelona. Un día después de haber detenido a los tres dirigentes de esta célula etarra -García Jodrá, Unai López de Ocáriz y Nerea Bengoa-, agentes de la Guardia Civil registraron el quinto piso del número 112 de la calle Bailén de Barcelona.

La mujer, que había alquilado este piso hacía pocos meses, ya había huido, y los agentes no encontraron armas ni documentación de interés. Fuentes policiales consideran que esta persona sólo realizó tareas de "apoyo logístico" al comando. Junto a los tres etarras, la Guardia Civil detuvo el viernes a otras tres personas, de las que una, Aurèlia Comas, ya ha sido puesta en libertad sin cargos. Comas no es prima de la también detenida Laura Riera, como se difundió tras la operación.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de agosto de 2001