El caso Cuéllar está desde ayer en los tribunales. El ex jugador del Betis, que fue suspendido de empleo y sueldo durante 15 días y posteriormente despedido 'por su bajo rendimiento voluntario', entre otros motivos, no llegó ayer a ningún acuerdo con el club que preside Manuel Ruiz de Lopera en el preceptivo acto de conciliación.
Cuéllar no sólo no acudió a esa cita, sino que ayer mismo presentó dos demandas contra el Betis. Una, por los daños y perjuicios derivados de la suspensión de empleo y sueldo a la que fue sometido a principios de agosto, por la que le exige 90 millones de pesetas, y otra, por los derechos de imagen y salario, por la que le reclama 60 millones más.
'Un disparate. No estamos dispuestos a reconocer esas cantidades', afirmaron ayer los servicios jurídicos del Betis.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 29 de agosto de 2001