La línea de costa de las provincias de Castellón y Valencia, junto al litoral de Málaga, el de la comarca del Maresme (Barcelona) y la zona de la Costa Dorada (Tarragona) son las zonas más degradadas del litoral mediterráneo español, según las conclusiones de la organización ecologista WWF-Adena durante la campaña Una frontera de vida-A fondo 2001, que termina hoy. Por el contrario, en mejor situación se encuentran Baleares, Almería, Murcia y ciertos enclaves de Alicante.
'Tras un mes de navegación por aguas de nuestro litoral, el equipo de campaña ha constatado que las praderas de posidonia, los cordones dunares y los humedales costeros son de los ecosistemas más amenazados de nuestro territorio', alerta la organización. Entre las amenazas del litoral mediterráneo español, los ecologistas destacan la especulación urbanística y el desarrollo del turismo de sol y playa.
También advierten de los problemas derivados del sistemático incumplimiento de la normativa vigente; la excesiva edificación; la construcción de espigones de hormigón y de nuevos puertos deportivos; la contaminación por vertidos; el impacto de los arrastreros... Según Adena, se han perdido el 60% de los humedales costeros y el 75% de la superficie dunar. Asimismo, el 78% de las praderas de posidonia está perdiendo densidad de haces y se han detectado problemas relevantes en hasta 1.400 hectáreas de acantilados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 30 de agosto de 2001