Los vecinos de Noves de Segre (Alt Urgell) cortaron ayer por espacio de más de un cuarto de hora la carretera C-14 (antigua C-1313) para protestar contra el proyecto de un vertedero de escombros y materiales de la construcción que la Generalitat de Cataluña quiere instalar en su término municipal. La movilización, en la que participaron más de un centenar de personas, se desarrolló sin incidentes, aunque originó retenciones de tráfico en la principal carretera de acceso al Principado de Andorra en plena operación retorno.
La protesta estuvo organizada por la Plataforma Antivertedero de Noves de Segre, que cuenta con el apoyo de la mayoría de los 70 vecinos que residen habitualmente en la localidad y de diversas entidades ecologistas. El colectivo afirma que los terrenos en los que una empresa privada pretende ubicar el polémico vertedero son muy permeables y esa circunstancia comportaría la contaminación de los acuíferos. Los vecinos también aseguran que el vertedero está diseñado a la medida de las necesidades de Andorra, cuyas empresas constructoras tienen actualmente serios problemas para depositar los escombros en su propio territorio.
La plataforma, que ha presentado más de 150 alegaciones y un pliego de 1.500 firmas en contra del vertedero, considera que su construcción no reúne suficientes requisitos legales. El vertedero, que será el mayor de Cataluña, tendrá una superficie de siete hectáreas y una capacidad para 75.000 toneladas de escombros anuales durante un periodo de 39 años.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 2 de septiembre de 2001