El ciudadano holandés de 73 años A. M. H., cuyo cadáver fue hallado el lunes maniatado y en avanzado estado de descomposición en un chalé de Dénia, murió tras recibir un golpe en la cabeza con un objeto contundente, según se desprende de la autopsia. Se baraja la posibilidad de que tras la muerte se intentará trasladar el cadáver, porque estaba atado como si fuera un atillo, más fácil de transportar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 5 de septiembre de 2001