El señor Távora defiende un teatro en el que 'la muerte no sea de cartón piedra' para justificar la inclusión del rejoneo y la muerte de un toro en su ópera Carmen. Lógicamente, y según los argumentos del señor Távora, la muerte debe llegar a la Carmen también. ¿Tantas cantantes hay que quieran sacrificarse para que 'la muerte no sea de cartón piedra'?
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 6 de septiembre de 2001