Las llamas arrasaron ayer un edificio de viviendas de la calle de los Jardines número 23 (Centro) que estaba deshabitado y en el que se realizaban obras de reforma. Los bomberos necesitaron dos horas para controlar y extinguir las llamas, ya que el incendio afectó a la estructura de madera y se propagó hasta la cubierta.
El fuego comenzó a las 19.15 por causas todavía no esclarecidas en la planta baja del bloque, según explicó el jefe de guardia de los bomberos. Ayer se investigaba si partió de un depósito de acetileno (hidrocarburo utilizado para iluminación o soldadura).
La estructura de madera facilitó la rápida propagación de las llamas por las otra cuatro plantas. También alcanzó la cubierta. Los 25 bomberos que acudieron a sofocar el incendio centraron sus esfuerzos en que no pasara a los edificios colindantes, que sí están habitados. Al final lograron controlarlo y extinguirlo en unas dos horas, y comprobaron después con una cámara de infrarrojos que no existieran focos ocultos por la madera.
El incendio provocó una densa columna de humo que pudo verse en gran parte de la zona centro de la capital. La calle de los Jardines estuvo cortada al tráfico durante las labores de extinción.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 7 de septiembre de 2001