"Y, ahora, en Argentina, más patadas". Rivaldo, el jugador brasileño del Barça, frunció el ceño, con un gesto de complicidad, cuando hace días estaba a punto de volar de Sevilla a Barcelona. El zurdo se sentía feliz por la victoria en el Sánchez Pizjuán, pero todavía se dolía de las faltas recibidas. Rivaldo presumía que algo similar le iba a suceder en el Argentina-Brasil del pasado miércoles, aunque no debió imaginar que volvería de Buenos Aires con la peor lesión de su carrera. Es la primera vez que va a estar tanto tiempo sin jugar. Rivaldo llegó ayer a Barcelona con un esguince del ligamento lateral externo de la rodilla izquierda. Estará tres semanas de baja. Se perderá cuatro partidos de Liga y, lo que es peor, las tres primeras jornadas de la Liga de Campeones: el debut del miércoles contra el Olympique de Lyon y frente al Fenerbahçe, en Turquía, y el Bayern Leverkusen, en Alemania.
"Tengo un dolor muy fuerte en la rodilla. No sé si podré jugar ante el Rayo. Me voy ya a ver al médico", dijo Rivaldo a primera hora de la tarde en El Prat, mientras era acosado por los cazaautógrafos. Su sospecha se confirmó. El doctor Ricard Pruna examinó al jugador, que ya fue infiltrado en el descanso del Argentina-Brasil, y emitió un primer diagnóstico: el esguince en la rodilla que, de entrada, le descartaba para el encuentro ante el Rayo. El jugador acudió después a la clínica Asepeyo para someterse a una resonancia magnética que agravó la primera impresión. "No tiene ninguna rotura en la rodilla, pero tendremos que ir con cuidado. Pero es que además sufre una pequeña elongación, lesión asociada en el gemelo derecho. Esta última no me preocupa mucho, pero calculo que estará 20 días de baja", dijo el médico en la clínica. "Es un chico que nunca ha tenido excesivas lesiones, que se recupera bien, pero hay que cuidar ese ligamento porque es muy importante".
La lesión es la más grave que ha sufrido Rivaldo desde que está en el Barça. En las cuatro temporadas que lleva en el Camp Nou, el brasileño había faltado solo en 15 partidos de Liga -de 152- con un balance desalentador para el equipo: cinco victorias, cuatro empates y seis derrotas.
Carles Rexach, técnico del Barça, había previsto dar mañana descanso a Rivaldo para el debut europeo del miércoles y para, de paso, alinear a Saviola, que fue suplente en el debut de Sevilla. Los técnicos, incluso, ya le habían comentado al brasileño esa posibilidad. Pero la planificación ha servido de bien poco. También la especulación sobre el tridente -el trío formado por Rivaldo, Kluivert y Saviola-, ha quedado aparcada. Mañana ante el Rayo, el Barça deberá agarrarse a Kluivert, que espera no acusar anímicamente el varapalo de la eliminación de Holanda del Mundial. Y, sobre todo de Saviola, que no tendrá más remedio que tomar el relevo del brasileño. Y a todo el Barça le queda la mayor de las asignaturas: lidiar con un calendario muy denso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 8 de septiembre de 2001