Los vecinos de las 49 casas ubicadas en primera línea en la playa norte de Puçol (Valencia) rechazaron ayer abandonar sus viviendas a pesar de la orden de desalojo emitida por la Dirección General de Costas al considerar que es una 'injusticia' y que las casas 'no dan problemas al ser de planta baja', según el presidente de la asociación de vecinos de estos inmuebles, Felipe Esteve, quien explicó que los proyectos de regeneración y construcción de un paseo marítimo, por los que se acordó la expropiación de las casas, 'carecen de presupuesto'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 11 de septiembre de 2001