Las bolsas europeas lograron poner un final positivo a una jornada en la que no se esperaba nada bueno. Tras una apertura muy negativa, los ánimos se calmaron y las compras comenzaron a hacer acto de presencia en la mayoría de los valores. Telefónica cerró con una subida del 3,35%.
El mensaje lanzado por el presidente del Banco Central Europeo tranquilizó de manera importante a los mercados. Las compras comenzaron a hacer acto de presencia, ya que muchos inversores no querían perder la oportunidad de entrar en la renta variable a precios que se consideran atractivos. De todas formas, la situación de los mercados es muy difícil de valorar en estos momentos, pues a las dudas respecto a la marcha de la economía en general hay que sumar ahora las repercusiones económicas de los atentados ocurridos en EE UU. También los inversores estarán muy atentos a Wall Street una vez que reanude su contratación.
En un ambiente de gran incertidumbre, el índice general de la Bolsa de Madrid finalizó con una subida del 0,52% y el Ibex 35 terminó con una ganancia del 0,11%. La Bolsa de Londres ganó un 2,87%; París, el 1,34%, y Francfort se revalorizó un 1,48%.
En el mercado de divisas, el euro marcó un cambio medio de 0,9052 unidades, mientras que el petróleo cedió respecto a la jornada anterior. Repsol, que se benefició por la escalada del crudo, fue uno de los valores castigados ayer y se anotó un descenso del 4,07%.
El volumen de negocio en el mercado continuo superó los 286.000 millones de pesetas, 1.723 millones de euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 13 de septiembre de 2001