El secretario general de la OTAN, George Robertson, viajó ayer a Macedonia con el objeto de evitar una posible ruptura del acuerdo de paz. Fuentes de la Alianza Atlántica indicaron que las dudas del Parlamento de Skopje en aprobar una amnistía para la guerrilla nacionalista albanesa y en introducir reformas que beneficien a la minoría albanesa han puesto en peligro una misión de la Alianza destinada a desarmar a los rebeldes para finales de este mes de septiembre. 'He venido a comprobar que el proceso de paz está encarrilado y a animar a los políticos de Macedonia a que se mantengan en esa línea', dijo Robertson. La guerrilla albanesa, que ocupó las montañas del norte de Macedonia durante seis meses de conflicto, aceptaron el pasado mes de agosto entregar sus armas a cambio del reconocimiento de derechos civiles a la citada minoría en Macedonia bajo un acuerdo de paz bajo supervisión de la OTAN.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de septiembre de 2001