El secretario federal de Política Económica del PSOE, Jordi Sevilla, afirmó ayer que las actuaciones como notario de Luis Ramallo en relación con Gescartera ponen de evidencia 'la doble moral de muchos dirigentes del Partido Popular'. 'Por ello no nos hemos sorprendido de que quien fue el mayor inquisidor del Reino con respecto al PSOE no tenga la casa en orden', añadió en referencia a Ramallo, ex diputado del PP y ex vicepresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
'Lo que me preocupa', agregó Sevilla, 'es que el secretario general del Partido Popular, Javier Arenas, quiera seguir utilizando desde el Gobierno, a base de ventilador, esa estrategia que en su día representó Ramallo'. El dirigente socialista resaltó que los datos que se van conociendo sobre Gescartera 'señalan responsabilidades políticas' y que 'no es verdad que la CNMV interviniera Gescartera por iniciativa propia'. Según él, 'se vio obligada, después del trato de favor que le estaba dando, por una denuncia de Caja Madrid ante la falsificación de un sello de caucho'.
Para Sevilla, 'Gescartera no hubiera sido posible sin la actuación activa del ex secretario de Estado de Hacienda Enrique Giménez-Reyna y la complicidad activa de la presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Pilar Valiente, los dos muy amigos del presidente del Gobierno'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 16 de septiembre de 2001