No son pocos los que han convertido los grupos de noticias en un teatro de operaciones bélicas. Siete foros dedicados a Pakistán se hospedan en la dirección mencionada abajo, de los cuales tres cuentan con moderadores. El odio indecible que se profesan hindúes y paquistaníes alimenta gran parte de las comunicaciones, con el conflicto de Cachemira como trasfondo y una conclusión casi inevitable: esto se puede escapar de las manos.
Entre los mensajes, malos augurios en abundancia. El peor de los escenarios posibles: Pakistán sumido en una guerra civil auspiciada desde la India para hacerse con el poder sobre Cachemira. Un primer paso que iría seguido de la toma del poder por parte de los pro talibán paquistaníes, quienes se adueñarían del devastador potencial nuclear de este país musulmán. Estas visiones apocalípticas se simultanean con las maquinarias de propaganda de los países y organizaciones en conflicto.
Conteniendo las náuseas, puede uno encontrar pequeñas joyas, como la que firma Kent Madin, para quien los bombardeos sobre Afganistán son lo que los terroristas quieren para lograr adeptos. Su propuesta va en un sentido diferente: ofrecer a los afganos un futuro esperanzador, para alejarlos de los talibán: 'Bombardeadles con mantequilla, con arroz, pan, ropas y medicinas. Costará menos que las armas, no habrá bajas estadounidenses y podría hacer que la población pensase que quizá los talibán no son la respuesta. Todo lo que les pediremos a cambio es que entren en el mundo civilizado y entreguen a los terroristas'. El bueno de Kent recibe tantos aplausos como conmiseraciones por ingenuo y utópico.
[UR] -
www.york.ac.uk/ServerSupport/UsenetNews/h_soc.culture.pakistan.html
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 27 de septiembre de 2001