Sigo sorprendiéndome a menudo y por desgracia de tantas sentencias que sobre violaciones se dictan actualmente. Me estoy refiriendo a la sentencia en la que ha sido absuelto un guardia civil por robo e intimidación sexual.
¿Hasta cuándo las mujeres vamos a seguir soportando que una violación no sea delito? ¿Hasta cuándo se justificará que la mujer siempre la provoca? Y sobre todo, que, por ser en este caso 'un agente servidor de la paz y la seguridad', se dé por sentada su inocencia.
¿Qué extraña amnistía rige aún en España para los agresores de la mujer?
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 27 de septiembre de 2001