Cerca de 800 expertos de 70 países inician hoy en Madrid el primer congreso mundial de Agricultura de Conservación, en el que reclamarán un nuevo modelo para labrar la tierra más respetuoso con el medio ambiente, frente a la agricultura intensiva.
En el marco comunitario, la aplicación de la Política Agrícola Común ha contribuido a modernizar el sector. Pero, tanto las labores intensivas, como la quema generalizada de rastrojos, han provocado la erosión del suelo, el deterioro del medio ambiente y la eliminación de la biodiversidad. El 60% de la superficie de la zona mediterránea -el 50% de la española en concreto- tiene un alto riesgo de erosión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 1 de octubre de 2001