Como ya es tradicional, la fiesta del partido se celebró arropada con la presencia de nacionalistas y movimientos amigos de tres continentes.
Anacleto Bokesa, delegado del Movimiento por la Autodeterminación de Isla Bioko, fue saludado por Arzalluz unos segundos antes de comenzar su discurso. La isla de Bioko, que perteneció a la Guinea española hasta que se independizó en 1968, está situada a unos 32 kilómetros al sur de Camerún, en África Central.
Procedente de Asia, apoyó al nacionalismo vasco con su presencia el delegado del Partido Democrático del Kurdistán Karlos Kurdi.
De otros países de Europa llegaron Christian Guyonvarch, de la Unión Democrática de Bretaña; el secretario general de la Unión del Pueblo Corso, François Alfonsi, y Gustave Allirol, del Partido Occitano.
Entre los dirigentes políticos de otras comunidades autónomas estuvieron Carlos Bautista, del Partido Andalucista; Paulino Rivero, de Coalición Canaria; Paco García, del BNG; Josep Antoni Durán i Lleida, presidente de Unió Democrática de Catalunya, y Jordi Martí de C DC.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 1 de octubre de 2001