La imposición por decreto, apoyado por el 'Séptimo de Caballería', de la línea eléctrica de Les Gavarres evidencia, a juicio de Rafael Ribó, portavoz de Iniciativa per Catalunya-Verds (IC), el auténtico estilo político del Gobierno que preside Jordi Pujol. Ribó, en su intervención en el debate de política general, instó a Pujol a convocar elecciones anticipadas o a cambiar de aliados rompiendo su pacto con el Partido Popular para poder cumplir con su promesa de elevar el autogobierno de Cataluña. El dirigente ecosocialista se sumó así a la propuesta lanzada por Carod Rovira, quien le precedió en la tribuna, de aislar a los conservadores e instaurar un Gobierno con todas las fuerzas 'democráticas catalanistas'.
El conflicto de Les Gavarres centró buena parte de la intervención de Ribó, quien acusó al presidente catalán de estar 'al servicio de los poderosos' y de actuar siguiendo el 'ordeno y mando'. Y dijo que el decreto de la Generalitat no es más que una 'imposición autoritaria insultante'.
A juicio de Ribó, Jordi Pujol se sirvió en su discurso de 'perversiones dialécticas' para criticar la política autonómica del PP, con el que comparte, dijo, los mismos principios 'económicos y sociales', y le recriminó que siempre busque 'un enemigo exterior, con el que finalmente acaba pactando'.
'¿Por qué no busca otras alianzas? ¿Por qué no acude a la población y convoca elecciones anticipadas?', le preguntó el dirigente de IC-V al presidente catalán. 'Usted', prosiguió, 'va cayendo en la pendiente constante de la burguesía catalana, que pacta con sus homónimos de España no en un matrimonio de conveniencia, sino en una coincidencia ideológica'.
En su turno de réplica y en un tono marcadamente irónico, Pujol se disculpó por no haber prestado mucha atención al discurso de Ribó. Pujol, dijo, estaba 'reflexionando' sobre la anterior intervención de Carod Rovira. Después, el presidente se disculpó por su desordenada respuesta y respondió a Ribó que no sólo el PP paraliza el aumento del autogobierno catalán. 'Las actitudes con más menosprecio hacia CiU las he recibido del PSOE y no del PP', subrayó.
El presidente defendió la actuación de su Gobierno para resolver la paralización de la línea de Les Gavarres en beneficio de 'los vecinos, los hoteleros de la Costa Brava y de las poblaciones cercanas'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 4 de octubre de 2001