El Gobierno regional va a crear la figura del Defensor del Paciente, una institución que defenderá los derechos de los enfermos frente a los de la Administración. A partir del 1 de enero, todas las competencias del Insalud en Madrid (17 hospitales y 45.000 trabajadores) dependerán de la Comunidad, y el Defensor del Paciente, cuya creación anunció ayer Alberto Ruiz-Gallardón, también. El presidente regional afirmó que, a pesar de esta coincidencia, el Defensor del Paciente será 'independiente'.
A Ruiz-Gallardón le parece razonable que esta nueva figura institucional dependa directamente de la consejería a la que tiene que controlar, porque el 'prestigio de la persona' que sea elegida le conferirá la independencia necesaria. 'El Defensor del Paciente estará dentro de la consejería, pero será independiente', insistió el presidente, quien remarcó que la nueva institución contará con 'la autoridad suficiente' para 'corregir los defectos' del sistema sanitario. Ruiz-Gallardón aseguró además que, cuando la Sanidad esté en manos de su Gobierno, los pacientes podrán elegir cirujano y hospital.
El Defensor tendrá como objetivo atender las 'quejas, reclamaciones y sugerencias' que le hagan los usuarios del sistema sanitario, y actuará 'de intermediario en los conflictos'. Juan Bestard, viceconsejero de Sanidad, explicó que el Defensor no tendrá dependencia directa de los gerentes de los hospitales, y elaborará informes que serán estudiados por la consejería. 'Se trata de un gran avance y un paso valiente con respecto a lo que existe ahora. La consejería tendrá de primera mano informes donde los pacientes explicarán cúal es su visión del sistema sanitario', dijo. El Defensor estará abierto a los ciudadanos 'las 24 horas de los 365 días del año, algo que actualmente no ocurre' con el sistema sanitario en manos del Insalud.
Nueva ley regional
Ruiz-Gallardón anunció, en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Gobierno, que el Ejecutivo está ultimando la Ley del Ordenación Sanitaria de la Comunidad de Madrid (Loscam), 'intrumento extraordinario' con el que el Gobierno pretende afrontar las competencias sanitarias del Estado. El Ministerio de Sanidad transferirá a Madrid, el próximo 1 de enero, competencias por valor de medio billón de pesetas (17 hospitales y 45.000 funcionarios).
El Ejecutivo cree encontrarse frente a una 'oportunidad histórica', y pretende mejorar notablemente el sistema sanitario. Para lograrlo ha diseñado una ley que incluye novedades en la gestión. Entre ellas, el citado Defensor del Paciente y la creación de agencias sanitarias en municipios y distritos. Su función será servir de gestoras entre el sistema sanitario y 'el mundo burocrático', según Bestard. 'Velarán por que los pacientes tengan sus problemas resueltos', señaló.
Ruiz-Gallardón se comprometió a que los ciudadanos puedan elegir 'en el cien por cien de los casos' el hospital y el cirujano que deseen que les atienda. Los pacientes manejarán tres variables para elegir el lugar de su operación: la cercanía del centro sanitario, el tiempo de espera y el médico.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 5 de octubre de 2001