El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana ha dado por válida la moción de censura presentada el 24 de agosto de 2000 en el Ayuntamiento de Chiva tras desestimar el contencioso-administrativo presentado por el grupo municipal popular del Consistorio chivano. El Partido Popular, encabezado por el alcalde relevado tras la moción, Joaquín Salvo, impugnó el pleno del 24 de agosto alegando que la moción sólo se motivó 'por una sucesión de hechos protagonizados por un concejal renunciado' y argumentando que dicho concejal, llamado Ramón Antolí, que pertenecía al PP, había dejado su cargo el 28 de julio, y que por tanto no podía votar en la moción de censura.
El tribunal ha desestimado este contencioso, ya que el concejal Ramón Antolí presentó otro escrito donde revocaba su solicitud de dimisión el 31 de julio y pedía su inclusión en el Grupo Mixto. Además, el tribunal destaca el hecho de que la dimisión de Antolí no fue hecha efectiva ante el pleno de la Corporación y por tanto su decisivo apoyo para que la moción fuese adelante es válido. El grupo popular de Chiva, por boca de su portavoz, Joaquín Salvo, 'asume y acata la sentencia que pone fin a la última vía emprendida para evitar una moción que, a juicio del PP, se presentó sin fundamento y sobre la base de una supuesta ingobernabilidad municipal'. Por otra parte, señala que el actual equipo de gobierno está inmerso en luchas internas y se caracteriza por la 'falta de proyecto político'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de octubre de 2001