El Gobierno ha reforzado la seguridad en el barrio alicantino de San Blas con 'continuos patrullajes' para evitar agresiones a gays y lesbianas como la del pasado 8 de julio en la calle de San Salvador, cuando dos jóvenes fueron agredidos por su condición sexual, según una respuesta parlamentaria remitida a la diputada del PSOE en las Cortes Generales Leire Pajín. El dispositivo de seguridad se puso en marcha como consecuencia de esta agresión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 12 de octubre de 2001