Las televisiones de medio mundo acumulan espectadores y baten récords de audiencia e ingresos publicitarios gracias al conflicto bélico, pero todo parece confabulado para que la CBS sufra las peores consecuencias. Los atentados terroristas en Estados Unidos del 11 de septiembre provocaron la suspensión de la entrega de los Premios Emmy, cuyos derechos tenía la CBS (con los espacios publicitarios ya vendidos). La gala iba a celebrarse el domingo pasado, pero Bush decidió atacar Afganistán pocas horas antes de que se levantara el telón y la ceremonia se suspendió de nuevo. Y el jueves, justo cuando la CBS esperaba estrenar su gran apuesta de la temporada, la tercera edición de Supervivientes, Bush convocó una rueda de prensa que se vio obligada a retransmitir en directo.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de octubre de 2001