El agua vuelve a manar de los surtidores y fuentes de los parques y jardines públicos de Alcoy después de un año sin funcionar. El Ayuntamiento ordenó hace un año el cierre de estas instalaciones públicas al considerar que eran susceptibles de producir aerosoles, y como medida preventiva ante la posibilidad de que se convirtieran en posibles focos de emisión de legionela.
La reciente reapertura de las fuentes públicas responde a las recomendaciones de la empresa Alcora, que se ha encargado de instalar unos sistemas de cloración para evitar que el agua a presión que sale de estos surtidores genere los aerosoles a través de los cuales se transmite la legionella neumophilla. Con esta actuación el Ayuntamiento de Alcoy, gobernado por el PP, da casi por cerrado el periodo de riesgo para la aparición de nuevos brotes de la bacteria a la espera de que la Consejería de Sanidad confirme la situación de normalidad, ya que no han aparecido nuevos casos en las últimas semanas.
El concejal de Sanidad, Julio Fontoba, precisó que el riesgo de que aparezcan nuevos casos de neumonía por legionela no concluirá hasta que lo dictamine el Consell. Fontoba exigirá un informe completo que analice la situación epidemiológica para dar por cerrada, después de dos años, la epidemia de legionela que en Alcoy ha afectado a cerca de 200 personas, 9 de las cuales fallecieron.
El único foco de contagio reconocido por la Administración son las torres de refrigeración de las empresas. La aparición de numeroso casos provocó la clausura de estas instalaciones. Se obligó a las empresas a cambiar y limpiar todos los sistemas de refrigeración que produjeran microgotas. El Consell puso en marcha un protocolo de seguimiento de los aparatos de refrigeración que ha dado negativo en los últimos análisis.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 15 de octubre de 2001