Los 29 okupas mayores de edad detenidos en el desalojo de la casa ocupada Can Titella y en los posteriores disturbios en las calles del barcelonés barrio de Gràcia quedaron ayer en libertad con cargos tras pasar a disposición del juez. Éste puso en libertad sin cargos a dos de los detenidos, que no llegaron a declarar ante el magistrado puesto que el decanato de la Universidad Autónoma de Barcelona certificó que eran alumnos de Ciencias de la Comunicación que hacían prácticas y estaban grabando los enfrentamientos entre policías y okupas. Los okupas están acusados de daños, atentado contra la autoridad, desobediencia a la orden judicial y desórdenes públicos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 20 de octubre de 2001