Un hombre de 40 años portador de sida, que abusó sexualmente de un menor retrasado mental sin adoptar las medidas necesarias para evitar el contagio de la enfermedad, no irá a la cárcel al ser condenado a 18 meses de prisión por un tribunal de la Audiencia de Barcelona. La Sección Séptima de la Audiencia ha condenado a Enrique Sellarés Roig como autor de un delito de abuso sexual, aunque ha rebajado en ocho años y medio la petición de las acusaciones de 10 años de prisión, al no considerar probado que el procesado penetrara al menor. Sellarés, que también ha sido condenado a indemnizar con un millón de pesetas al menor, no ingresará en prisión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 20 de octubre de 2001