El Madrid, limpio y verde con el que nuestro señor alcalde trata de concienciarnos no parece haber llegado aún a determinadas instancias municipales ni a determinadas calles del distrito de Ciudad Lineal. Las denuncias por vehículos abandonados que se presentan en la Junta Municipal de Distrito tardan varios meses en ejecutarse.
Tal retraso lleva a que se acumule suciedad y aumente la presencia de insectos y roedores en los vehículos abandonados (como puede comprobarse en algunos situados en las calles de Benidorm, Máximo San Juan y Hermanos Gómez), que podrían llegar a infectar las viviendas.
Quizá la única alternativa a que esos vehículos molestos y focos de suciedad desaparezcan sea la de prenderles fuego, ante lo cual aparecerían los bomberos, y los servicios municipales, que todos pagamos, procederían a su retirada. ¿Es esto lo que quiere el Ayuntamiento?
Al mismo tiempo, parece que los servicios de limpieza no hacen mucho por la labor en algunas calles del distrito, ya que es frecuente observar un aumento del grado de suciedad y deterioro en los alcorques de ciertas calles del distrito. Unas calles deben ser más pobres que otras; por eso no se cuidan.
Quizá la única alternativa a que mejore la limpieza y la conservación del distrito es que los vecinos lo paguen de su bolsillo. Si esto es así, señor alcalde, no me pida que le pague los impuestos de contribución, porque no sé dónde van a parar esos fondos: a mi barrio no están llegando.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 22 de octubre de 2001