Los sindicatos UGT y CCOO criticaron ayer que la futura Ley de Universidades situará a España en un periodo 'predemocrático' y rechazaron la reforma 'no consensuada con la comunidad universitaria', por lo que llamaron a la comunidad universitaria a la jornada de huelga prevista para el 7 de noviembre, que afectará a 260.000 alumnos y a 14.000 profesores en Andalucía.
El secretario general de UGT-A, Manuel Pastrana, explicó ayer que la reforma del Gobierno central 'sale contra la propia comunidad universitaria' y advirtió de que causará una 'confrontación política partidaria' que 'mediatizará' la calidad de esta enseñanza.
Por su parte, el responsable de Universidades de CCOO-A, Jesús Jiménez, coincidió con UGT en sus críticas a la futura norma porque supone un 'claro retroceso en los avances logrados hasta ahora' e insistió en que hay que dar una 'respuesta unitaria' contra ella.
Jiménez consideró que la futura norma es 'profundamente antidemocrática', que 'claramente beneficiará a los intereses de las universidades privadas' y lamentó que pese a que se plantee como una iniciativa para impulsar la calidad de esta enseñanza ni siquiera recoge un Plan de Financiación para estos centros que los sitúe a niveles similares al del resto de Europa.
En este sentido, los representantes del sindicato de estudiantes y coordinadora de estudiantes y profesores asociados alertaron de que el Gobierno 'quiere convertir la educación en un negocio', por lo que reiteraron su llamada a las movilizaciones previstas para el próximo 25 de octubre en Sevilla, junto a otras acciones de protesta, que culminarán con una jornada de huelga en toda España el próximo 14 de noviembre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de octubre de 2001