José Antonio Díaz Jiménez, un soldador de 32 años, murió ayer tras recibir una descarga eléctrica cuando trabajaba en una obra en construcción en una finca ubicada en el término municipal de Los Molinos, según fuentes del Insalud-061 y de la Guardia Civil.
El obrero pereció poco antes de las cuatro de la tarde, mientras intentaba desconectar el soldador con el que realizaba su trabajo. Los compañeros que se encontraban en el lugar lo trasladaron hasta el centro de salud de Guadarrama, adonde llegó con parada cardiorrespiratoria. Durante 45 minutos los facultativos intentaron, sin éxito, reanimarlo. Posteriormente se trasladó hasta allí una UVI del Insalud cuyos médicos sólo pudieron certificar su muerte. Díaz residía en Los Molinos.
Los responsables del sector del Metal del sindicato CC OO desconocían ayer sus condiciones de trabajo. El accidente que segó la vida de este soldador es similar al ocurrido el pasado lunes, cuando un obrero de 22 años pereció electrocutado mientras trabajaba en una zanja de la calle de Cervantes, en el distrito de Centro. En el primer semestre de este año, según datos del Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo (IRSST), se han registrado 13 muertos en el sector del metal, lo que supone un incremento de más del 300% con relación al pasado año.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de octubre de 2001