El informe de fiscalización del Tribunal de Cuentas (TC) del Ayuntamiento de Tibi entre 1994 y 1996 recoge una serie de 'deficiencias e irregularidades' en la regulación urbanística de este municipio de L'Alcoià. El apartado de control interno del Ayuntamiento, gobernado por el PP, destaca que la actuación del secretario-interventor de la corporación ha estado condicionada por la carencia de 'control y disciplina' en los proyectos de urbanización y las obras. Estas irregularidades se han traducido, según el informe del TC, en una 'minoración' en los ingresos relacionados con la gestión urbanística, lo que afecta a impuestos sobre muebles de naturaleza urbana, contribuciones especiales y a tasas y precios públicos por servicios complementarios.
El informe detecta la 'ausencia' de licencias de primera ocupación y de expediente de sanción urbanística. El documento del TC insta al consistorio a 'elaborar, tramitar y aprobar' sus presupuestos con las modificaciones de crédito pertinentes. Los hechos se refieren a un crédito por ingresos no tributados y financiada por el Banco de Alicante para el pago del proyecto de la Finca Terol. El informe del TC detecta además irregularidades en la aprobación de la cuenta general en los plazos legales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 26 de octubre de 2001