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Crónica:EUROLIGA | BALONCESTO

El Real Madrid aprovecha el caos del Zadar

Agarrado a la muñeca del veterano prodigio llamado Herreros y a la capacidad de buscarse la vida en la pintura de Tarlac, el Madrid resucitó del duermevela europeo en el que la indolencia de sus jugadores le tenía sumergido. Despertó y se impuso al Zadar croata con la autoridad de quien sabe que sus piezas, una a una y en cualquier parte de la cancha, son muy superiores a las del rival. Eso sí, a los blancos les costó un periodo terminar de desperezarse del todo. Un periodo, 10 minutos, y que Scariolo se decidiese a que jugasen Herreros y Djordjevic. El madrileño anotó tres triples casi consecutivos que amontonaron un parcial de 28 - 10 en el segundo cuarto.

ZADAR 73| REAL MADRID 81

Zadar: Robinson (20), Perincic (5), Marcelic (16), Oduok (8) y Grgat (11) -Cinco inicial- Ruzic (2), Vrsalijko, Sparlja, Dijan, Vladovic, y Popovic (11). Real Madrid: R. López (3), A. Angulo (2), Vukcevic (11), Tabak (3) y Tarlac (22) -Cinco inicial- Struelens (7), Djordjevic (13), L. Angulo (8), Herreros (12) e Iturbe. Árbitros: Jurgerbrand (Finlandia), Lovsin (Eslovenia) y Zamojsky (Polonia). Unos 6.000 espectadores en el pabellón Jazine.

Los blancos, confiados a la puntería de Herreros y al acierto desde la pintura de Tarlac combinados con una agresiva defensa de Lucio Angulo sobre el base americano del equipo croata Robinson, permitieron al Zadar organizar un desastroso concurso de triples. Ni las jóvenes promesas Marcelic o Popovic, ni el más curtido Perincic, consiguieron romper con su acierto la zona defensiva del Madrid.

Los dos conjuntos convirtieron los últimos minutos en un cúmulo de despropósitos. Una amalgama de fallos, carreras y faltas con el balón rebotando sin dueño de un lado para otro. Un clima de descontrol que contagió al marcador: un minuto marcaba la mayor diferencia del Madrid y al siguiente el Zadar recortaba hasta la frontera de los diez puntos. Y vuelta a empezar. El partido quedó completamente desmadejado, pero en el caos el Madrid se manejó un poquito mejor que el equipo croata.

Un poquito. No mucho, porque el grupo balcánico llegó a colocarse a tres puntos de distancia gracias a una serie de aciertos de Marcelic, desaparecido hasta esos momentos de confusión. A Marcelic se le unió Popovic y los croatas recortaron a base de coraje. Djordjevic volvió a la cancha y aliado con los pívots blancos Tarlac y Strulens, además de a la inefiente defensa interior del Zadar, recuperó la serenidad y, de paso, parte de la ventaja perdida. Lo suficiente para llevarse su segunda victoria en la Euroliga y recuperar el pasito perdido con la derrota ante el Novo Mesto la semana pasada.

Derrotas del Barça y Unicaja

No anda fino el Barça. Eso quedó claro ayer, a tres días para que dispute el clásico en Madrid. Sufrió lo indecible y perdió por 73-77 ante un equipo muy limitado, el Peristeri, que no sabía aún lo que era ganar en la Euroliga y que, por los problemas para pagar a sus jugadores, mantiene un contencioso con Ferran al que en castigo dejó ayer en Atenas. Pero tirando del talento de Dinkins y de la mano y corpulencia de Wojcic, el Peristeri desballestó al equipo azulgrana en el que el mal funcionamiento colectivo resultó clamoroso.

Por otra parte el Unicaja de Málaga cayó en Tel Aviv ante el Macabbi por 82-60. El equipo andaluz, que en descanso superó a sus rivales por 23-28, se hundió sobre todo en la segunda mitad del encuentro, periodo en el que el Maccabi dio la vuelta al marcador. El Unicaja logró sólo seis puntos en el último cuarto del partido, lo que da idea del escaso juego con el que cerró la cita.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 26 de octubre de 2001