La masa monetaria de la zona euro aumentó en septiembre un 7,6% respecto al mismo mes del año anterior, tras elevarse un 6,7% en agosto. Ese incremento supone una significativa aceleración de la liquidez en los países adscritos a la moneda única, según datos difundidos ayer por el Banco Central Europeo (BCE), que justificó esta evolución como reacción a la incertidubre desatada tras los atentados terroristas en EE UU.
El BCE que "el fuerte incremento del M3 en septiembre puede asociarse con una pronunciada preferencia por parte de los inversores de posiciones de liquidez en reacción a la creciente incertidumbre derivada de los ataques terroristas del pasado 11 de septiembre". La masa monetaria es un indicador de inflación a medio plazo, porque refleja el dinero que está disponible de una forma rápida para la compra de bienes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 27 de octubre de 2001