Un artefacto colocado junto a un coche de un agente de la Guardia Civil estacionado en Irún (Guipúzcoa), explotó anoche sin provocar víctimas si bien causó daños a otro turismo aparcado en la inmediaciones, según informaron a Efe fuentes policiales. La explosión se registró a las 23.05 horas a la altura del número 11 de la calle Aureliano López de Becerra, próxima a la estación del Eusko Tren de Irún y provocó un pequeño incendio en un coche. Las mismas fuentes precisaron que el artefacto estaba preparado para causar daños en el vehículo de un guardia civil pero únicamente afectó a un monovolumen, un Citroën Scenic de color azul oscuro matriculado en San Sebastián que estaba aparcado junto al del agente.
En cambio fuentes de la lucha antiterrorista citadas por Europa Press afirman que el coche afectado es un Renault Megane propiedad de un guardia civil que fue rociado con gasolina. Varios vecinos de la zona acudieron al lugar con un extintor y lograron sofocar la llamas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 30 de octubre de 2001