El nuevo sistema de control basado en la identificación de la huella dactilar mediante tarjetas digitales empezó a funcionar ayer en el puesto fronterizo de Beni-Enzar, entre Melilla y Marruecos. Está previsto distribuir 50.000 tarjetas entre los habitantes de la zona vecina de Nador.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 31 de octubre de 2001