El viceconsejero de Pesca, Luis Miguel Macías, calificó ayer de 'desacertada' la decisión de las cofradías de pescadores de la Cornisa Cantábrica de no salir a faenar mientras las administraciones de Francia y España y la Unión Europea no garanticen su seguridad al descargar en los puertos franceses. Macías explicó que, a juicio del Gobierno vasco, la decisión de amarrar la flota 'significa dejarles la mar y el mercado a los franceses'.
Macías adelantó que la semana entrante responsables de su departamento se reunirán con representantes de la UE. El viceconsejero criticó la actuación del Gobierno central en este conflicto y el hecho de que a la reunión de las cofradías en Santoña enviara a un subdirector del ministerio. Por su parte, el ministro francés de Agricultura y Pesca, Jean Glavany, declaró ayer que es necesario evitar que se reanude 'la guerra de la pesca' en el Golfo de Vizcaya.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 4 de noviembre de 2001