La segunda edición de Periferias se cerró en Huesca con un menú diverso y variado. Este menú tuvo cuantiosos elementos de riesgo y atrevimiento, algo ya sustancial a un certamen cuya mera existencia es casi un milagro.
Pues de milagroso cabe considerar que coincidiesen en su despedida el free jazz de la Sun Ra Arkestra, el rock atormentado y elaborado de los franceses Mobiil, la electrónica amable y housy de los rumanos NSK o el enciclopédico repaso a la historia de la música popular negra realizado en una maratoniana sesión del Sound System de la revista Rock de Lux.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 5 de noviembre de 2001