Que la ópera salga del Liceo a la calle es un hecho cuando menos extraño. Pero eso fue lo que sucedió anoche. Cientos de personas siguieron mediante dos pantallas gigantes situadas en la avenida de la Catedral y La Rambla la interpretación de Macbeth, de Verdi, que interpretaron la Orquesta y Coro de la Scala de Milán bajo la dirección de Riccardo Mutti. Con la cara enrojecida por el viento frío que soplaba en Barcelona, los ocasionales liceístas callejeros admiraron la actuación de los artistas. Pese a todo, La Rambla no perdió su espíritu bullicioso, cacofónico contrapunto a Verdi.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 8 de noviembre de 2001