En la presentación de las cuentas del Arzobispado estuvo presente el nuevo obispo auxiliar de Barcelona, Josep Angel Saiz, cuyo nombramiento ha levantado críticas de ciertos sectores de la Iglesia catalana, que le considera excesivamente conservador. El cardenal Carles atribuyó estas críticas a 'un grupo que es crítico desde siempre, que es pequeño y que no ha aceptado el nombramiento no sé por qué'.
Saiz insistió en su 'actitud abierta y dialogante con todos'. Las críticas, añadió, 'no hay que obviarlas, pero sí relativizarlas'. El nuevo obispo sí se pronunció sobre las inversiones de instituciones eclesiásticas en Gescartera. La Iglesia, dijo, 'ha sido víctima y no verdugo en este escándalo'. Fue un error, admitió, pero defendió que la Iglesia invierta su dinero, porque si no, sería criticada por tener el dinero 'debajo de la baldosa'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 10 de noviembre de 2001