La Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz, con sede en Ceuta, ha condenado a 12 años de prisión y a una multa de 600.000 pesetas a J. V .C., profesor de un colegio público de la ciudad autónoma, por tres delitos de prostitución de menores. La defensa del maestro ha recurrido la sentencia al Tribunal Supremo. Los hechos se remontan a abril del año 2000, cuando el acusado, junto a otros dos varones, fue detenido en las inmediaciones del centro de menores San Antonio, en el extrarradio de Ceuta, donde residen unos cien niños de origen marroquí, de 9 a 17 años de edad, que se encuentran en situación de desamparo.
La policía comenzó a vigilar la zona tras las advertencias que los educadores realizaron en la comisaría, ya que tenían constancia por declaraciones de los niños, de que varios adultos les ofrecían dinero a cambio de favores sexuales. La Policía Nacional estableció un dispositivo de vigilancia y detuvo finalmente a los tres adultos, tres varones españoles de mediana edad, en las inmediaciones de la casa de acogida, en el monte Hacho, acusándoles de sodomizar y someter a un trato vejatorio a los pequeños a cambio de cantidades que oscilaban entre 200 y 500 pesetas. Estas detenciones provocaron una gran convulsión social en Ceuta, al conocerse que la profesión de uno de los detenidos era la de docente.
De los 12 menores de los que supuestamente abusaron, tan sólo tres declararon en el juicio, celebrado en septiembre, pero el tribunal considera probados los hechos, por lo que ha condenado a J. V. C., que ya tenía antecedentes por delitos similares en Canarias. La condena se eleva a 12 años de prisión, cuatro por cada uno de los delitos, y a indemnizar con 200.000 pesetas a cada una de las víctimas. En la vista judicial prestaron declaración los menores, así como los monitores que por aquel entonces trabajaban en el centro, que reconocieron al profesor como el autor de las vejaciones a los niños marroquíes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 12 de noviembre de 2001