Izquierda Unida es, hasta ahora, la única fuerza política con implantación nacional que se opone frontalmente a la guerra de Afganistán en general y aún más al envío de tropas españolas. Lo hace porque considera que 'las principales víctimas' de este ataque son 'los civiles afganos'. Pero, además, IU exige que una guerra como esta tenga el respaldo de la ONU. Y en lo que se refiere al envío de tropas españolas, además de oponerse, la coalición exige que esa decisión obtenga el refrendo del Parlamento. Por eso Gaspar Llamazares, el coordinador general, aseguró ayer que si, como todo parece indicar, el Gobierno no somete a votación el envío de tropas, la coalición acudirá al Tribunal Constitucional.
La vía sería la del conflicto de competencias entre las Cortes y el Ejecutivo. IU interpreta que el artículo 63 de la Constitución obliga a ello, ya que dice: 'Al Rey corresponde, previa autorización de las Cortes Generales, declarar la guerra y hacer la paz'. IU y los expertos que ha consultado entienden que el envío de tropas para una ofensiva militar equivale a una declaración de guerra. Llamazares recuerda además que todos los Gobiernos europeos, incluidos algunos como el italiano que no están obligados por su Constitución, han sometido a votación de sus Parlamentos el asunto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 13 de noviembre de 2001