Con pertinaz y montaraz denuedo, don Rodrigo trata de desviar la atención puesta en sus trapicheos evocando lo que él y sus correligionarios denominan 'el pasado socialista'; a falta de otro argumento, se aferra al ya tradicional y clásico 'pues vosotros más'. Visto su desmesurado entusiasmo por los tiempos pretéritos, creo que sería menester llevar a cabo una amplia y profusa divulgación sobre el vasto -y, a menudo, basto- 'pasado popular'. Podrían editarse, por ejemplo, biografías de quienes integran e integraron los distintos gobiernos formados por el señor Aznar, donde, minuciosamente, se describieran y descubrieran los orígenes y posterior evolución de sus haciendas.
Y para hacer aún más comprensible el porqué de sus privilegiadas situaciones actuales, podrían publicarse también unos árboles genealógicos que plasmaran las actividades de sus respectivos antepasados durante la II República, durante la guerra civil y durante la casi interminable posguerra.
Nada de lo que en esas hipotéticas publicaciones pudiera aparecer sorprendería a los que rebasamos la cincuentena: nos es de sobra conocido; pero serviría para mostrar a las generaciones posteriores que 'el pasado popular' no es, como pretenden hacer creer, precisamente ejemplar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 13 de noviembre de 2001