La FIFA aseguró ayer que su situación financiera no ha variado sustancialmente en el último semestre y que la 'quiebra de ISL no ha ocasionado más pérdidas en su presupuesto que los 5.800 millones de pesetas ya conocidos'. La quiebra de ISL y los atentados de Nueva York forzaron a la FIFA a firmar un nuevo seguro del Mundial de 2002 con la empresa estoduinidense National Indemnity.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de noviembre de 2001