Cinco agentes de la Policía Local reconocieron ayer ante el juez que realizaron funciones de escolta de Jesús Gil durante la moción de censura que presentó el Grupo Independiente Liberal en Ceuta, en agosto de 1999. Los agentes habían sido citados como testigos por el titular del Juzgado número 1 de Marbella, que instruye la denuncia interpuesta por el Partido Andalucista contra Gil por utilizar a 15 funcionarios de este cuerpo como escoltas suya y de la diputada tránsfuga Susana Bermúdez, durante la toma de posesión del gilista Antonio Sampietro como presidente de la ciudad autónoma. La Fiscalía acusa al regidor marbellí de los delitos de malversación de caudales públicos y prevaricación.
Los agentes negaron haber actuado en su día libre, como ha declarado Gil en varias ocasiones para justificar su presencia en la ciudad norteafricana, y aseguraron que 'cumplieron órdenes' cuando formaron un escudo de protección en torno a Bermúdez y Sampietro. Cuatro de ellos admitieron, además, que pasaron la noche en el hotel La Muralla, alojamiento que según el concejal andalucista, Carlos Fernández, se abonó con cargo al erario público. El abogado municipal, José María del Nido, aseguró que lo pagó Gil de su propio bolsillo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de noviembre de 2001