El pleno extraordinario que la Diputación de Almería se dispuso a celebrar ayer, a petición del grupo socialista, sobre el estado de la provincia no pudo iniciarse por la salida en bloque de todos los diputados del PSOE. Tras el primer punto del orden del día, en el que los grupos se pronunciaron sobre la urgencia de la sesión, los 10 diputados abandonaron el salón de plenos como protesta al orden del día establecido por el presidente de la Diputación, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador.
El portavoz socialista, Andrés Caparrós, acusó al presidente de ajustar el debate a 'su interés y su estrategia'. 'Nos ausentamos por no querer ser partícipes de un falso debate. Si quiere hablar de sanidad y salud, hágalo en el parlamento andaluz del que usted forma parte, señor presidente', espetó el portavoz socialista a Rodríguez-Comendador.
El portavoz del grupo popular, José Luis Aguilar, insistió en la legalidad del orden del día -consultado con los servicios jurídicos de la Diputación- y acusó a los socialistas de 'escabullirse de' sus responsabilidades. 'Vamos a hacer estrictamente lo contrario que hace su gobierno en Sevilla: ser estrictos con la ley. Se va a debatir estrictamente el orden del día que el presidente ponga y no lo que usted diga. Todo lo contrario de Sevilla, que no cumple la ley, ni el estatuto y que es irrespetuoso con los ciudadanos de Almería', dijo Aguilar. El grupo socialista, que se retiró tras 50 minutos de réplicas, ha anunciado la 'inmediata solicitud' de otra convocatoria de pleno en los términos que expresaron.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de noviembre de 2001