El aumento de tasas aeroportuarias solicitadas por el ente público Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) para el próximo ejercicio, que oscila entre un 2% y un 10%, supone un sobrecoste de casi 45 millones de euros (7.500 millones de pesetas) para las compañías aéreas españolas.
Este aumento, que deberá ser aprobado por el Congreso de los Diputados, es "imprescindible para mantener la salud del ente público", según indicó su el director general de Aena, Pedro Argüelles.
Opinión que no es compartida por Iberia, Air Europa y Spanair, que deben unir este sobrecoste a las pérdidas ocasionadas por la crisis que soporta el sector desde el atentado terrorista en EE UU el pasado 11 de septiembre.
Para Iberia, que opera una media diaria de 900 vuelos, el aumento de un 2% en las tasas de aterrizaje, y de un 10% en las de aproximación, supone unos 36 millones de euros (6.000 millones de pesetas) más de lo previsto para este ejercicio. Por su parte, Air Europa, con 250 vuelos diarios, debe desembolsar el próximo año la cifra de 5,1 millones de euros (850 millones de pesetas). En cuanto a Spanair, con 165 vuelos de media diaria, este incremento de las tasas supone un aumento de costes de 1,86 millones de euros (309 millones de pesetas).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de noviembre de 2001