Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

EE UU ataca por error una mezquita en pleno Ramadán

Washington
El vacío de poder provocado tras el hundimiento del régimen talibán ha desatado una disputa entre el principal frente de oposición a los integristas, la Alianza del Norte, y Naciones Unidas, que quiere que todas las fuerzas afganas estén representadas en un Gobierno de unidad nacional. El internacionalmente reconocido como presidente del país, Burhanudin Rabbani, se presentó ayer de improviso en Kabul, aunque el enviado de la ONU, el español Francesc Vendrell, le advirtió de que no podrá convertirse automáticamente en el líder del nuevo Afganistán. Mientras, los talibanes sembraron la confusión sobre el paradero de Osama Bin Laden y del mulá Omar.

Fuerzas estadounidenses bombardearon el pasado viernes por error una mezquita afgana, cuando se acababa de iniciar el Ramadán, el mes de obligado ayuno entre los musulmanes. Su inicio no impidió que continuaran las operaciones militares sobre Afganistán de los norteamericanos y la oposición afgana, con el fin de asfixiar lo máximo posible la resistencia de los talibanes.

El Comando Central Americano, órgano del Pentágono que coordina la campaña bélica contra los talibanes, reconoció ayer que una bomba de 250 kilos guiada por láser había impactado junto a una mezquita en Khost, al este del país, junto a la frontera con Pakistán, por culpa de un mal funcionamiento del sistema de guía del proyectil.

Dos bombarderos estadounidenses tenían previsto atacar un edificio que supuestamente servía de base a la organización terrorista Al Qaeda, localizado en Khost. Pero, mientras dos de las bombas GBU-12 que lanzaron los aviones alcanzaron su objetivo, una tercera se desvió. La explosión que provocó al impactar contra el suelo alcanzó a la mezquita y provocó importantes daños en su estructura, aunque el Pentágono confesó que no disponía de información sobre si hubo alguna víctima.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 18 de noviembre de 2001