Hace más de dos décadas, trabajadores vascos empezaron a reunirse clandestinamente en la Mina del Alemán, en el barrio de La Reineta de Trapaga, para ver cómo luchar por mejorar sus condiciones de trabajo. CCOO trasladó ayer hasta allí uno de los actos de su 25º aniversario como homenaje a quienes pusieron los cimientos de lo que luego fue la central. Ante unas 200 personas, el secretario general de CCOO-Euskadi, Josu Onaindi, asumió el compromiso de que el sindicato prosiga el trabajo que allí comenzó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 19 de noviembre de 2001