El pianista Albert Sanz presentó anoche en la Sala 4 de Valencia Kalifactors, un cuarteto de jazz formado por jóvenes músicos que se conocieron en Boston, donde el pianista valenciano sigue las enseñanzas del reputado Berklee College of Music. Tanto Sanz, como el saxofonista Robert Stillman, el contrabajista Chris Van Voorst y el baterista Kendrick Scott (a quien robaron ayer todas sus pertenencias, incluida la batería) son de una misma generación (entre 21 y 24 años), lo que no les ha impedido tocar con veteranas figuras del jazz, como Steve Lacy, Danilo Pérez, Benny Golson, Lionel Hampton, Louie Bellson, Roy Hargrove, Donald Harrison Mark Turner o Kurt Rosenwinkel. Sanz, además, recibió en 2000 el premio Tete Montoliu al pianista revelación y su primer álbum fue considerado el mejor disco de jazz por la revista Cuadernos del Jazz.
Los jóvenes leones de Kalifactors llevan varios meses preparando y rodando un repertorio original, concebido desde una filosofía que ignora los límites impuestos por los géneros musicales. De hecho, las composiciones que interpretan a lo largo de este mes en una docena de ciudades españolas, asumen influencias diversas que van de Prokofiev a Radiohead, pasando por Wayne Shorter. Son, además, la base del próximo álbum de debú del cuarteto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 21 de noviembre de 2001